Existen ocasiones en los que la solicitud de una licencia de segunda ocupación se hace necesaria e incluso obligatoria. Por este motivo, es recomendable saber cuándo hay que pedirla y también cómo hacerlo, con el fin de que puedas tener todo en regla y que no te encuentres con que estás infringiendo ninguna norma, algo que podría ocasionarte cuantiosas multas. En este artículo te vamos a ayudar a solventar todas tus dudas al respecto para que sepas qué es la licencia de segunda ocupación y cuando solicitarla.
¿Qué es la licencia de segunda ocupación?
Uno de los documentos más importantes que debes tener en tu poder cuando has comprado una casa que no es nueva es la licencia de segunda ocupación. Cuando hablamos de dicho documento, nos referimos a un modelo que tiene carácter administrativo y que se usa para comprobar y atestiguar que la vivienda que se ha comprado cuenta con los mínimos exigidos para la habitabilidad, ya bien sea de calidad en las tuberías, suelo o incluso de higiene.
No contar con esta licencia de ocupación es lo mismo que decir que la vivienda que has comprado o adquirido no cuenta con lo estipulado para vivir en ella y por lo tanto, hasta que no esté en cumplimiento y con todos los papeles en regla, no se podrá acceder a habitarla. El periodo de estos documentos suele ser de unos 15 años de caducidad, debiendo de renovarlos una vez que se vaya a acabar este plazo. Muchos de los organismos y ayuntamientos locales exigen que se realice este tipo de trámites en menor tiempo, debiendo de seguir la regulación autonómica de cada ciudad. Cabe destacar que este tipo de documento, como más adelante te especificaremos, es necesario y obligatorio si se quiere dar de alta servicios como por ejemplo la luz o el agua en la vivienda.
¿Cuándo necesito la licencia de segunda ocupación?
Destacamos que por norma general, todas las viviendas cuentan con una licencia de segunda ocupación, a no ser que la casa sea relativamente nueva y lo que tenga sea una licencia de primera ocupación. La de primera ocupación está destinada a viviendas que han sido construidas recientemente, sin embargo, cuando ya toca ser renovada esta cédula o a dicha vivienda va a vivir otra persona, es cuando se habla de licencia de segunda ocupación.
Es importante saber que para ciertos trámites es necesario contar con dichos documentos, como por ejemplo la contratación de la luz, agua o incluso el gas, puesto que al tratarse de nuevos inquilinos, el anterior ha dado de baja ya estos servicios y se requiere conocer las características del sistema de tuberías y también eléctrico, para confirmar que cumple con lo estipulado en la región.
Por otro lado, si la casa ha sido puesta en alquiler o se quiere vender, este documento será necesario por los notarios y también por la inmobiliaria, puesto que estará asegurando que la vivienda es habitable y por lo tanto, legal para poder vivir en ella.
Los procesos de tramitación de la licencia de segunda ocupación son varios, pudiéndolo hacer por medios telemáticos, es decir, por medio de las Sedes Electrónicas de cada comunidad, aunque en este caso se requerirá de una firma digital que haya sido validada anteriormente. Por otro lado también se puede realizar de manera presencial, debiendo de saber que existen lugares en los que hay que coger cita previa un par de semanas antes para realizar todo el papeleo, debiendo de moverte algo más que en los formatos electrónicos.
Para aquellas personas que no saben si su licencia de segunda ocupación está o no en regla, existen maneras de averiguarlo, como también empresas que se encargan de todos estos trámites que pueden agilizar mucho más todo el proceso dado que conocen los requisitos y la documentación para que todo esté en regla.